Por Alba Alfaro (NEL)

Hacer un Draw my life tiene sus indicaciones en la red, para que sea «perfecto» debe: revelar detalles de la vida personal y familiar «poco conocidos hasta ahora», y debe hacerse de una manera «divertida» para el público. Esta moda reciente en Youtube entra en la lógica de ese empuje que en lo contemporáneo produce nuevas transformaciones de la intimidad afectando a las familias de hoy. Se trata, en esta vía ligth de revelar los secretos más íntimos de una familia, de obtener un plus: intentar borrar las determinaciones del Otro sobre la propia existencia. Pero, si bien podemos localizar aquí un nuevo rostro que en la era de la cyber tecnología toma ese viejo ideal humano, el sueño de libertad y autonomía que implicaría «un mundo sin castración, un mundo donde el saber excluye lo imposible»,[1] es decir el de «un mundo sin real», también podemos ubicar en él una renovada y férrea voluntad de amo: se es hablado tal «como una marioneta con su ventrílocuo».[2]

NOTAS

  1. Castanet, H. (2006), Un monde sans réel, Association Himeros, La Rochelle, p. 7.
  2. Ibíd.