CITAS

… conmover al Otro materno, lo que me llevó al mal encuentro con un hombre parecido al bebé del poster, que hacía que mi madre se jactara de que ya que no había tenido ningún hijo parecido al bebé Johnson’s, los nietos que yo le daría sí cumplirían con su ideal, lo que me daba la ilusión de un reaseguro fálico. Aunque este bebé Johnson’s tenía ciertas excentricidades, compartíamos los mismos gustos culturales. La máscara de esa reciprocidad imaginaria me impidió ver lo que había detrás, el ser objeto de goce del fantasma de la madre. Esa mascara cayó con una ruptura imprevista y abrupta: “como pudiste siguiera pensar que un hombre como yo se podría enamorar de una negra como vos”. Quedé devastada. […] hizo pedazos la ofrenda sacrificial con la que esperaba hacerme amar por el Otro materno y rompió el velo de la identificación imaginaria del falo materno. […]

En el hombre estrago no había ni metáfora del amor ni del deseo ni del goce. Se redobló el objeto-desecho que yo era para mi madre: petrificada en ese dicho que hacía iterar el deseo del Otro, identificada a esa posición, desamarrada de mi propio deseo, me aislé y me abandoné a los riesgos de un pasaje al acto suicida, en el intento de forzar la extracción del objeto mirada del Otro real de la madre.

Giraldo, M.C. , Risa, Revista Bitácora Lacaniana, Nº6, Septiembre 2017. P.82

El encuentro contingente y azaroso con un hombre hace advenir el amor y la pasión, poco tiempo después celebraba mi matrimonio y con ello un cambio de posición y de elección del partenaire sexual, con el que hoy comparto mi vida, mi solución, me deja ir y venir, suelta. La operación del psicoanálisis permite, por un lado, quedar-se suelta con un hombre y no arrancar o desaparecer para esperar que vuelva. […] El análisis entonces permitió subvertir el mandato o madre o mujer, por una parte, dejarme tomar por un hombre y por otro parte, un padre para mis hijas, así vivir con la diferencia. Es ahí que una vez que hay un giro un arreglo a la posición de rechazo a la feminidad es que pude acceder a la maternidad […] Fui de la tragedia de la familia de origen, de “lo mismo”, destino de la repetición a la comedia con una alegre y suelta calma, armando mi propia versión de familia, no-toda mujer, no-toda madre, no-toda psicoanalista, no-toda

Cornu, P. , Testimonio 1. Presentado, vía Zoom, en “Enseñanzas del pase de la NEL” el 16 de Enero de 2021. El amor y la elección sexual. Nuevas formas de amor familiar.

Una vez le pregunté al hombre amado: ¿desde cuándo te gusto? me respondió: “si lo supieras, no podrías creerlo”. Ese mecano poético que medio dice y se me vuelve memorable, supera para mí al mejor discurso amoroso

Giraldo, M.C. , (2016) Presentado en las IX Jornadas de la NEL, Violencias y Pasiones. Sus tratamientos en la experiencia analítica, Guayaquil, 23 de octubre de 2016 y en las XXV Jornadas anuales de la EOL Hiperconectados. Los psicoanalistas frente a los lazos virtuales, Buenos Aires, 30 de octubre de 2016.

El sacrificio siempre pide más… Sacrificar era un intento de ser toda para el Otro y preservar mi lugar agalmático, tapando su agujero. Sin embargo, sacrificar plegándome a su fantasma me hacía perder mi propia brújula y extraviarme aún más. Si ser independiente nunca ha sido ni un ideal ni una reivindicación, tuve que atravesar la dependencia alienante del amor como droga dura velando la falla de la ausencia de relación sexual, para llegar a la separación del goce que esto implicaba y restituirle al amor su parte de nobleza. Poder encontrar una alternativa más allá de la perspectiva fálica me permitió aceptar no tratar más de ser todo para el otro, sin desaparecer, vaciando el sentido del sacrificio

Horne, V. , (2020) Murmullo. Revista “El psicoanálisis” 35 Editorial Escuela Lacaniana de Psicoanálisis. Febrero 2020

Me abrí a un nuevo amor, el de un hombre que supo esperar por mi sin garantías que soportó el saberme no-toda y al que sigo amando cada vez, aún. No sé, ni quiero saber, por qué me ama, yo no lo sé de cierto, como dice el poeta; lo femenino pasa por el enigma del amor como una claridad difusa que hace parte de la opacidad de la sombra femenina. Ese nuevo amor que me permitió velar, por pudor, el horror del estrago de su mirada, de a poco me fue enseñando una nueva manera de relación con mi cuerpo de mujer y me permitió des-cubrir mi goce con otro cuerpo

Giraldo, M.C. , Risa, Revista Bitácora Lacaniana, Nº6, Septiembre 2017. P.84. El amor como suplencia. El amor y la elección sexual

El valor del acontecimiento de cuerpo no está en la violencia en sí misma sino en lo que ella activa en el circuito de goce pulsional. Activación que no puede ser delimitada sino por la vía de otra pasión inédita, la del amor de transferencia. […] El amor de transferencia recupera en la persona del analista los fragmentos de discurso establecidos a lo largo de la vida, o por un lado, metaforizan los signos de amor y por otro, adquieren el valor de una presencia que es “en ti más que tú”, refiriéndome a Lacan cuando denota el “objeto a” en su Seminario 11. En ti más que tú quiere decir que más allá de la mirada de amor hay un agujero

Carrijo Da Cunha, LF. , El fantasma, tejido de dolor y amor, Revista Bitácora Lacaniana, Número Extraordinario, Abril 2017. P.71

Arme dos parejas  con dos hombres importantes en mi vida. La primera nació entre la locura, el saber y el amor al psicoanálisis. Cierto estrago marcó esa relación. Su voz brillaba mientras yo elegía  callar. Era una elección comandada por el fantasma y la creencia en La mujer. El rechazo a lo femenino, a lo real, se daba así en ambas partes.

La elección inconsciente de mi otro partenaire tras un encuentro contingente fue más sinthomatica y más allá del padre. Amor y pulsión se anudaron de otro modo. Me sedujo su voz y su modo de hablar, pero principalmente  es un hombre que me hace abrir la boca para hablar y para probar las delicias que me cocina. Podría decir que el chef es mi frutilla del postre. Pase de ofrecerme como comidita al goce del Otro, a hacerme hablar y disfrutar de una buena cena

Kuperwajs, I. , (2020) Huellas Revista Lacaniana de psicoanálisis. Año XV N°28 Ps 109 - 110 Publicación de la Escuela de Orientación Lacaniana. Agosto 2020

El primer marido era sobrino del padre y por lo tanto llevaba su nombre. Amor cortés donde ella ocupaba la posición de objeto supervaluado. Identificada al objeto ideal, pero no sin prescindir de la carne y el hueso, sostenía la bella imagen falicizada que encubría un cuerpo todo erotizado, por donde la pulsión navegaba sin límite y sin destino, produciendo un exceso de sexualización

Lutterbach Holck, A.-L. , (2012) La erótica y lo femenino, Buenos Aires, Grama Ediciones, p. 22

La Virilidad  supone siempre una posición ligada a la fobia. En efecto, es un deseo prevenido por la posibilidad de perderla. Es así que hoy las mujeres se quejan de que los hombres son fóbicos; tienen razón, es la estructura viril. En ese sentido, eso supone siempre una posición de cobardía. En cambio, en el final de la identificación viril abre a la posibilidad de un coraje que avanza sin la prevención del tabú del otro sexo y permite hacer la apuesta de un deseo decidido.

¿Deberemos esperar de los AE hombres para que testimonien de su coraje?

Siendo muy niño me sostenía en el ejercicio reiterado del goce del Uno. De las diversas formas en las que cada quien se las rebusca para repetirlo incesantemente, en mi caso, patear, batear,  arrojar, impactar una pelotita fue mi predilecta. 

Ese mundo, solitario aun con otros, se desacomodó imprevistamente por la presencia de una mujer. Les presentaré a la vecinita que quería jugar de otra manera

Tudanca, L. , (2014) Troumatisme Revista Lacaniana de Psicoanálisis Año IX #16. Publicación de la Escuela de Orientación Lacaniana. Marzo 2014